Con fecha 1 de septiembre el diario Publimetro publicó un artículo sobre la descarga de canciones ilegales a través de internet. En dicho artículo aparece la intervención de nuestro secretario ejecutivo, Francisco Vera Hott. A continuación reproducimos el artículo publicado:
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Alguien te mira cuando estás descargando a tu computador el nuevo disco de Coldplay, el de Lucybell o las viejas canciones de Madonna, para “calentar el ambiente” antes de sus conciertos de diciembre en el Estadio Nacional.
Un revelador informe de la International Intellectual Property Alliance (IIPA) da cuenta de que en Chile se están bajando ilegalmente 400 millones de canciones de artistas locales y del resto del mundo. 43% más que en el 2006, un año que ya fue considerado como inquietante por sus cifras.
“Chile tiene una penetración de la banda ancha de las más altas de la región, con 1.3 millones de suscriptores”, se indica en el estudio especial sobre nuestro país.
La piratería ha consumido el 50 por ciento del mercado de la música chileno en sólo unos pocos años, se afirma. Una combinación de la reproducción ilegal de CD y DVD, la creciente presencia de vendedores ambulantes que venden música pirateada y las descargas particulares.
Llevado a las cifras, la IIPA informó que en 2007 las pérdidas ascendieron a 29,6 millones de dólares.
El rol de la policía
Como “lejos de ser efectivos” califica este informe sobre la situación chilena a los esfuerzos emprendidos entre Carabineros e Investigaciones para reprimir la piratería en la calle.
De todos modos, se destacan las crecientes acciones de parte de Carabineros al participar “en allanamientos y la incautación de productos pirateados”.
Según datos atribuidos a la Federación Internacional de la Industria Fonográfica (IFPI) de Chile, en 2007 la policía participó en 100 redadas sólo en Santiago y Valparaíso, apoderándose de 168 mil cedés y 545 quemadores en colaboración con la IFPI.
El informe incluso identifica a barrios como el del Persa Biobío como “focos de piratería” que sólo han logrado ser neutralizados en una mínima porción.
La culpa es del usuario
Las visiones están muy divididas en cuanto a qué hacer rante esta irrefutable realidad.
Para Juan Cristóbal Guzmán, abogado experto en propiedad intelectual de Albagli Zaliasnik Chile, la única medida que ha comprobado ser efectiva es el castigo a los usuarios que bajan canciones en su casa.
“El ejemplo francés es muy bueno al respecto, con las medidas tomadas por el presidente Sarkozy en conjunto con los proveedores de internet. Más del 35% de la gente que ha sido sancionada no vuelve a bajar música”, explicó a Publimetro.
A su juicio, el problema local es que más allá de la buena voluntad de las autoridades para detener la piratería, “las leyes no están a la altura del problema ni de la realidad digital”.
Guzmán también acusa a la industria musical de “lenta”, pues no han logrado crear nuevos productos que sean lo suficientemente atractivos “para convencer al comprador”.
Por el contrario, según la ONG Derechos Digitales, el último responsable en esta cadena es el usuario “afectado a diario por un derecho de autor restrictivo”, según indicó su secretario ejecutivo, Francisco Vera Hott.
Alerta amarilla sobre Chile
Chile se encuentra entre los países con alerta amarilla o “Priority Watch list” para la IIPA en materia de piratería musical, de acuerdo con su reporte especial de 2008, junto a la Federación Rusa, Arabia Saudita, Tailandia, Ucrania, India, Egipto, China y, a nivel americano, a Canadá, México, Perú, Costa Rica y Argentina.
Arturo Figueroa
cronica@publimetro.cl