Si podemos incrementar nuestra seguridad a niveles deseables, sin poner tras las rejas a más y más usuarios de Internet, bienvenido sea. Al final del día la plena seguridad es una falacia, y debemos aprender a vivir en un ambiente inseguro, aunque sin renunciar a la intensión de llevar la inseguridad a márgenes tolerables, un asunto sobre el cual el hombre viene trabajando desde el principio de los tiempos.
Lee más en la columna publicada en Terra Magazine por Alberto Cerda Silva, Director de Estudios de ONG Derechos Digitales y Profesor de Derecho y Nuevas Tecnologóas en la Universidadde Chile.