Según se supo extraoficialmente, su retiro se debe a que las decisiones finales no serán técnicas sino políticas.
En su carta, dirigida al ministro de la Protección Social, Diego Palacio, los técnicos, que representaron a esta cartera en las 12 rondas del TLC, señalan que el pasado miércoles el jefe del equipo colombiano, Hernando José Gómez, indicó que el cierre de esta mesa sería determinado por decisiones políticas. Por lo tanto, el trabajo técnico había concluido.
Desde el mismo lunes, cuando comenzó esta XII ronda, el malestar en el equipo de propiedad intelectual de Colombia, Perú y Ecuador fue evidente, pues el negociador estadounidense puso sobre la mesa la vieja propuesta presentada el año pasado cuando se lanzaron las negociaciones que, en general fue rechazada por los tres países andinos.
En ella, Estados Unidos plantea el patentamiento de seres vivos, segundos usos, procedimientos quirúrgicos y terapéuticos, protección a los llamados datos de prueba (en Colombia hoy es de cinco años y demora la salida de medicamentos genéricos), alargamiento del periodo de las patentes farmacéuticas (hoy en 20 años) por demoras en su otorgamiento y en la obtención del registro sanitario de medicamentos, para lo cual, antes de otorgarlo, la autoridad sanitaria (Invima) tendría que verificar que el solicitante cumpliera con las formalidades relacionadas con patentes, algo ajeno a las funciones que cumple la entidad.
Después de 16 meses de permanentes tensiones y roces con los miembros del equipo provenientes del Ministerio de Comercio, de haber sufrido la salida del asesor internacional del Ministerio de la Protección Social Carlos Correa por exigencia de Estados Unidos, los tres representantes de esta última cartera consideran que el acuerdo que busca la delegación estadounidense es altamente inconveniente para Colombia.
La renuncia de la delegación de la cartera de Protección Social que se produjo anoche es, según consultas de este diario, un llamado de alerta a la opinión pública para que extreme su vigilancia sobre las decisiones que se tomarán a nivel político.
La última propuesta que Colombia puso sobre la mesa siguiendo las directrices del presidente Uribe consiste en: compensarle a la patente el tiempo por demoras injustificadas en su obtención, reducir a un máximo de tres años la protección a los datos de prueba limitada a los medicamentos que en los 12 meses anteriores hubieran obtenido el registro sanitario en Estados Unidos, y que el Invima se limitaría a publicar las solicitudes del registro.
Ello, además, condicionado a que Estados Unidos retirara su propuesta de patentar seres vivos, segundos usos, procedimientos quirúrgicos y terapéuticos, a comprometerse a fondo en la lucha contra la biopiratería y a reconocer la importancia de los conocimientos tradicionales relacionados con la acción curativa de las plantas (lo que tendría que reflejarse en un permiso de acceso a los recursos genéticos de la región, a un contrato de distribución de los beneficios derivados del patentamiento de algún medicamento originados en ellos y a endurecer sus requisitos de patentamiento. Se esperaba que Estados Unidos diera alguna respuesta en esta ronda, pero en vez de ello insistió con su propuesta del año pasado.
Texto de la carta
Cartagena de Indias, 23 de septiembre de 2005
Doctor
DIEGO PALACIO BETANCOURT
Ministro de la Protección Social
República de Colombia
Respetado Señor Ministro:
Mediante la presente le informamos el resultado de la XII ronda de negociaciones del tratado de libre comercio con Estados Unidos, llevada a cabo en esta ciudad, en lo que hace referencia a los temas de Propiedad Intelectual relacionados con la Salud.
No hubo ningún avance significativo en los asuntos de interés de Colombia. Contrario a esto, los representantes del Gobierno de Estados Unidos mantuvieron una posición inflexible que ha roto el equilibrio de las propuestas formuladas por los andinos, destinadas a dar solución integral y facilitar el cierre de la negociación.
De lo anterior se desprende que ninguna de las propuestas tiene validez y que por ende deben tomarse como base de las discusiones futuras los primeros textos intercambiados por los andinos y Estados Unidos, en consonancia con las reiteradas declaraciones en el sentido de que los andinos no hemos hecho ninguna concesión.
De otro lado, varios anuncios de prensa y declaraciones de los representantes del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo de Colombia han marcado el inicio de la fase de las decisiones políticas, dado que Estados Unidos ha manifestado claramente la imposibilidad de negociar con los andinos atendiendo a los intereses de las partes, hecho que hasta el momento había generado un monólogo de propuestas técnicas a las cuales no hubo ninguna respuesta.
Adicionalmente, con ocasión de la presentación del informe interno de mesas temáticas del día 21 de septiembre, el Jefe de la negociación por Colombia manifestó que lo que hasta el momento se consideraban propuestas de cierre no lo eran; el cierre iba a ser determinado mediante decisiones políticas dando con ello por concluido el trabajo de los técnicos.
Consideramos que en la fase de las decisiones políticas, los responsables de tales decisiones deberán enfrentar la inquietud cuya respuesta negativa suscitó y orientó nuestra participación en este proceso: ¿Es posible para el país adoptar un tratado de libre comercio con disposiciones semejantes a las acordadas por los países centroamericanos o Chile?
Desde nuestro punto de vista, en la mesa de propiedad intelectual esta alternativa es altamente inconveniente para Colombia.
De conformidad con lo anterior, respetuosamente sugerimos dar por terminada la participación del equipo técnico, en lo que resta del proceso.
Atentamente,
GILBERTO ALVAREZ URIBE
LUIS GUILLERMO RESTREPO VELEZ
JUAN FERNANDO GARCÍA ECHEVERRI